La transformación digital en los gobiernos implica la integración de tecnologías avanzadas en la administración pública para optimizar procesos, mejorar la toma de decisiones y fomentar la transparencia. En este contexto, la GEOtecnología se ha convertido en un pilar clave, ya que permite a los gobiernos gestionar de manera eficiente el territorio, planificar infraestructuras y facilitar la participación ciudadana. A través del análisis Geoespacial, los gobiernos pueden acceder a datos precisos y en tiempo real para abordar desafíos sociales, ambientales y económicos. La adopción de estas tecnologías no solo transforma la gestión pública, sino que también impulsa el desarrollo sostenible, la resiliencia ante crisis y la integración de los sectores público, privado y académico en un modelo de gobernanza digital. Este cambio hacia un gobierno 4.0 requiere una visión estratégica, inversiones en infraestructura de datos espaciales, y un enfoque ético que asegure que la tecnología se utilice de manera justa e inclusiva.